En un país tan golpeado por la crisis que una empresa se
lance a contratar personal me parece digno de mencionar y de alabar. Y en este
caso ha sido la Santa Madre Iglesia la que, concienciada por la dureza de la
situación, ha cogido el toro por los cuernos. El ínclito Rouco Varela ha dado
de alta a ocho nuevos exorcistas tras llegarle numerosas peticiones de diversos
puntos de España ante los ataques despiadados de Belcebú. Rumores no
confirmados descartan que tales exorcismos se vayan a realizar a ningún miembro
de nuestro estupendo y eficaz Gobierno.
Recomiendo a todos aquellos desempleados, ya que aquí parece
que puede haber una salida laboral interesante, que hagan de inmediato el curso
CEAC de exorcismo avanzado y en menos de seis meses estarán cotizando sus ocho
horas en su diócesis favorita. Les proporcionarán un sueldo fijo más horas
extras, treinta días de vacaciones en el balneario de agua bendita del complejo
de ocio de Vaticano D’Or y, por supuesto, la salvación eterna.
Para el que no lo sepa, y en mi afán de culturizar a las
masas, un exorcismo es un conjuro contra el espíritu maligno. Resulta que
alguien maligno es el que es propenso a pensar o actuar mal. Y ahí es cuando me
vienen a la mente nuestros reputados banqueros y otros entes que pululan por
nuestro sistema financiero. Entonces me doy cuenta que ocho exorcistas son
pocos, y hasta ochocientos me resultan escasos.
Rouco, saca por tu santa madre unas oposiciones de tres mil
plazas, y dales una lección a esos Mefistófeles de turno que nos acosan. Yo
mismo me presentaría. Estoy loco por gritar con el hisopo en una mano y una
cruz en la otra: “Vade Retro Satanás, sal del cuerpo de esos impíos banqueros y
de esos herejes fondos de inversión”.
La nueva Iglesia que viene es así. Ahora son exorcistas, lo
próximo será la vuelta de la Santa Inquisición. Es lo que tienen los Papas tan
humildes, austeros y campechanos. Tened cuidado, que por aquí ya sabemos de qué
pie cojean los campechanos…
Estupefacción.
(Publicado en El Independiente de Cádiz el 3 de Junio de 2013)
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